La elección de este símbolo heráldico surge de varias reflexiones sobre la personalidad del taller. Una constante era que nuestra identidad estuviera asociada a la ciudad que nos a moldeado como personas e influenciado como arquitectos, y después de una larga lluvia de ideas decidimos fijarnos en un elemento que compone el escudo de armas de Guadalajara: un pino es custodiado por un par de leones en posición rampante.
Pero ¿por qué un león rampante? En cierto sentido tiene mucho que ver con nuestro metodo de trabajo basado en el los análisis necesarios para crear un espacio adecuado a un encargo específico. Así logramos tener un símbolo asociado a nuestra ciudad, que se liga con su historia, intimamente asociado a su identidad y tambien con un gusto personal por los simbolismos.
Las características iconográficas de león rampante son las siguientes:
Su posición, con las garras hacia arriba, la derecha más arriba que la izquierda, con la fauce abierta y con la lengua de fuera, mostrando las garras y la cola desplegada hacia adentro.
